En el primer cuarto ya pudimos ver que era un partido de poder a poder. Ninguno de los dos equipos se mostraba más poderoso que su rival. Oklahoma City Thunder movía mejor el balón gracias a la gran visión de juego de Russell Westbrook, que supo cómo aprovechar los continuos dos contra uno que recibía cuando intentaba llevar al poste a Chris Paul. Por su parte, los Clippers aprovechaban la fuerza física de Green y Jordan para hacer daño a un Serge Ibaka que había visto dos faltas en los primeros minutos de partido.
Kevin Durant empezó muy enchufado anotándolos de todos los colores y distancias, mientras Westbrook se encargaba de integrar en el ataque a todos los miembros de su equipo.
Los Clippers sufrieron durante el primer cuarto para anotar de alguna forma que no fuese a través de la pareja Paul-Jordan.
Finalmente los Thunder terminaron el cuarto por delante en el marcador gracias al gran nivel en ataque de todos los jugadores (29-39).
En el segundo cuarto, los Thunder siguieron por delante en el marcador, pero si existía alguna mínima superioridad en el primer cuarto se desvaneció en el segundo. Los locales continuaban haciendo mucho daño bajo la batuta de Russell Westbrook, que además de superar su récord de asistencias en una sola mitad (12), estuvo más participativo a la hora de anotar.
Por otro lado, Chris Paul se echó el equipo todavía más a sus espaldas, sobre todo en la segunda mitad de cuarto, en la que él mismo redujo toda la distancia hasta llegar a poner el empate en el marcador a falta de menos de un minuto. Finalmente los Thunder se fueron 2 puntos arriba al descanso (62-64).
La primera mitad estuvo marcada por la baja defensa, solo hay que ver el resultado para ver que la intensidad defensiva brilló por su ausencia en los dos primeros cuartos.
Tras el descanso, el partido continuó igualado. Durante la mayor parte del cuarto, ninguno de los dos equipos lograba marcharse en el marcador. Chris Paul por un lado y Russell Westbrook por el otro eran los amos y señores del partido. Pero a falta de 5 minutos para el final, el ataque de los Clippers no fluía, demasiados tiros forzados ante la buena defensa de OKC que, a través de un estratosférico Westbrook alcanzó los 10 puntos de ventaja en dos minutos, ventaja con la que llegarían al último cuarto (83-93).
En el último cuarto todos los focos estaban pendientes de Oklahoma City Thunder, segundo equipo con más derrotas tras llegar ganando al último cuarto. Parece que los Thunder escucharon el dato y salieron más enchufados que nunca y en lugar de perder ventaja como es habitual, en lugar de eso subieron una marcha más aumentado su ventaja en 15 puntos a falta de 9 minutos para el final. Esta distancia se mantuvo a lo largo del cuarto gracias al gran partido tanto de Russell Westbrook (25 puntos, 20 asistencias y 11 rebotes) como de Kevin Durant (30 puntos, 12 rebotes y 7 asistencias), que fueron demasiado para Chris Paul que solo se vio apoyado por Redick (22 puntos), Green (23 puntos) y Jordan (18 puntos), pero de forma irregular.
