El lance fue recibido por la santiaguera Teresa Cepeda, con muletas, mientras el maeño Julio Montero actuaba como bateador de honor en una silla de ruedas y desde las graderías personas con algún tipo de discapacidad se solidarizaban con aplausos.
En esta nueva muestra de responsabilidad social y de inclusión de las Águilas estuvo presente en el montículo la madrina especial de los cibaeños, María Laura Vásquez Fernández, en compañía del presidente del equipo, Adriano Valdez Russo y otros directivos.
Para cerrar la ceremonia, la Fundación de Trabajadores con Discapacidad (FNTD) entregó una placa de reconocimiento a la directiva de las Águilas Cibaeñas “por apoyar la inclusión a través de sus acciones, creando así un precedente” en el béisbol invernal.
La placa fue entregada a Valdez Russo por José Ramón Sosa, presidente de la FNTD, y por Corporán en su calidad de presidente del CONADIS, previo al partido entre las Estrellas Orientales y las Águilas Cibaeñas.