El base de los New York Knicks, Derrick Rose, dejó el martes el juego que ganaron 114-103 ante el Miami Heat en el tercer cuarto por espasmos en la espalda y no regresó.
No está claro la gravedad del problema, aunque el base le dijo a los periodistas después del juego que se habían “calmado”.
“Dice que está apretado”, dijo el entrenador de los Knicks, Jeff Hornacek. “Va de la ingle a la parte baja de la espalda, así que espero que le den un tratamiento después del juego y veremos si puede estar listo para mañana por la noche”.
Rose dijo después del juego que no había problemas estructurales con su espalda. Esperaba jugar con los Knicks el siguiente juego -en casa ante los Cleveland Cavaliers el miércoles- pero señaló que sería “inteligente” al respecto.
“Bajó, es solo espasmos. Usualmente cuanto tienes problemas en la espalda, o espasmos, vienen de algún lado y esta noche de mi lado derecho, mi pierna derecha, todo era fastidioso, rápido”, dijo Rose, quien añadió que era un problema muscular. “Mañana seremos capaces de decir qué es”.