La NBA se vio obligada a cambiar de dirección por los
crecientes casos de COVID-19 dentro de la liga. Al menos 32 jugadores no están
disponibles por estas situaciones.
La alarma suena y hace mucho ruido en la NBA. La situación
por el COVID-19 modificó los tiempos de la liga ante la notoria suba de casos
que marcó la postergación de cuatro juegos. Por esta razón, tras anunciarse la
suspensión del lunes, hubo una reunión de gobernadores para definir nuevas
direcciones.
La junta realizó varias modificaciones, pero todas caen en
un punto en común. La NBA buscará una suerte de ‘Fase 2’ en la que los
jugadores y miembros de cuerpos técnicos solo podrán atender temas netamente
deportivos. Podrán salir de sus hogares solo podrán entrenamientos, actividades
de equipo y partidos. Lo mismo sucederá a la hora de los juegos de visitantes,
donde no podrán recibir a personas dentro de los hoteles.
Las medidas fueron
las siguientes:
Los jugadores no podrán interactuar con personas que no sean
integrantes del equipo en los viajes. Anteriormente podían invitar a sus
cuartos.
De local, los jugadores y los integrantes del equipo deberán
permanecer en su residencia. Sólo podrán salir para actividades relacionadas
con el equipo, actividades esenciales y en casos extraordinarios.
De visitante, deberán permanecer en los hoteles durante todo
el tiempo. Sólo podrán salir para actividades de equipo o emergencias. No
podrán visitar restaurantes aprobados, lo que estaba estipulado al inicio de la
temporada.
Por las próximas dos semanas, las reuniones pre partido
serán limitadas a 10 minutos. El resto de las reuniones entre miembros de un
plantel deben ser en la cancha y con una distancia de 1,80 mts entre cada
integrante.
Los visitadores de los equipos (médicos ajenos al cuerpo
técnico, por ejemplo) deberán ser testeados dos veces por semana. Obviamente,
deberán dar negativo en ambas ocasiones para entrar en contacto con los
integrantes del equipo.
Todos los jugadores que no estén en cancha deberán utilizar
el barbijo. Sólo podrán sacárselo en las zonas de masajes y tratamientos, los
cuales deberán estar a una distancia mayor a un 1,80 mts del banco de
suplentes. Una vez que terminan este contacto, deberán colocarse el barbijo
para retornar a sus asientos.
La liga tiene a 36 jugadores marginados de la actividad por
casos de COVID-19 o contactos estrechos con otros positivos. Estrellas como
Jayson Tatum, Jaylen Brown, Jimmy Butler, Bam Adebayo y Tobías Harris se
encuentran marginados por estas situaciones. Además, Kyrie Irving, DeMar
DeRozan, Kevin Porter Jr y TJ McConnell no se presentaron a juegos recientes
por situaciones personales.