LeBron James será baja para los partidos que jugarán los Lakers a domicilio, ante los Thunder y ante los Rockets. Este martes 15 de enero se cumplían tres semanas de su lesión, el Día de Navidad en el duelo de los angelinos ante los Warriors. Desde entonces, James se ha perdido 11 encuentros por un tirón en la ingle y los Lakers, sin su faro, firman un balance de 4-7, octavos del Oeste empatados en la novena posición con los Jazz.
Dura baja ante duros partidos
El jueves, los Lakers acuden a Oklahoma City para pelear contra los Thunder, terceros del Oeste y luego el sábado viajan a Houston para medirse contra los Rockets de un encedido James Harden. Los de Texas son cuartos del Oeste. En ambos duelos no estará James, informa ESPN de fuentes directas del jugador como es su agente Rich Paul.
A pesar de estas noticias, LeBron James progresa adecuadamente de su dolencia, una lesión complicada en cuanto a que siempre le ronda el peligro de volver antes de tiempo y agravar el problema. En las tres semanas que ha estado fuera James la rehabilitación ha sido buena, señala ESPN, el jugador ya participa en ejercicios a media pista y tiros a canasta y las sensaciones son buenas.
Quizá ante los Warriors
En el duro calendario que se le avecina a los Lakers, el lunes hay una nueva estación, en Los Angeles, donde los californianos reciben a losWarriors, ahora mismo líderes del Oeste y el último equipo contra el que jugó precisamente LeBron esta campaña.
Inédito en el año 2019, las ausencias ante OKC y HOU sumarán 13 partidos de baja para El Rey en la 2018-19, lo que le hace igualar su récord de ausencias en una temporada, cuando tuvo 13 partidos perdidos en la 2014-15. Sin embargo, el tope de partidos seguidos que se había perdido el astro de Akron como profesional era de 8, en esa 2014-15 donde tuvo que parar por problemas en la espalda y en la rodilla.
