La situación de espera por la que está pasando Isaiah Thomas no está siendo fácil y el jugador ha decidido romper su silencio y hablar para los que dudan de su estado físico. El base fue traspasado a Cleveland hace ya una semana, pero las dudas acerca de cuándo podrá volver a las pistas han dejado el traspaso paralizado y su situación laboral inmediata, paralizada.
“No tengo problemas permanentes. Volveré y seré el mismo jugador”, ha comentado Thomas en una entrevista exclusiva con Adrian Wojnarowski de ESPN. “Ningún médico me ha dicho lo contrario”.
El dos veces All-Star, elegido como miembro del segundo mejor quinteto de la NBA durante la pasada temporada, insistió en que “no ha habido indicación alguna de que no estaré de vuelta ni ha habido indicación de que esto vaya a perjudicar mi carrera”. De esta forma, Thomas contradice a los que puedan pensar que su futuro está en duda a causa de la lesión que le afectó durante el último tramo del curso pasado y le hizo tener que dejar de jugar en plenas Finales de Conferencia.
“Ni un solo doctor me ha dicho que esta lesión vaya a influir en mi carrera”, ha dicho. “La cirugía no es la mejor opción en este caso. Me agravé la lesión en marzo cuando Karl-Anthony Towns cayó encima de mí. Seguí jugando y empeoró hasta que ya no pude jugar más el pasado año”.
En la campaña 2016-17 Thomas, de 28 años, promedió 28,9 puntos por partido, la mejor marca de su carrera como profesional en la NBA. El que fuera elegido como número 60 del Draft de 2011 terminará su actual contrato el próximo 30 de junio de 2018 y buscará un contrato máximo a partir de entonces.
