TAMPA, Florida, EE.UU. -- Cumplida su suspensión, Alex Rodríguez se presentó el lunes en el campo de entrenamiento de los Yanquis, tres días antes de la fecha indicada, para tratar de recuperar un lugar en el equipo luego de estar alejado más de un año del béisbol.
El toletero llegó al mediodía, luciendo una sudadera verde de la Universidad de Miami.
Rodríguez fue suspendido por violar las normas sobre drogas y el contrato laboral. Ofreció disculpas al equipo el 10 de febrero y a la afición la semana pasada, mediante un comunicado. Pero todavía no ha hablado en público de las razones por las que fue suspendido.
El antesalista, quien cumplirá 40 años en julio, no juega una temporada completa desde el 2007 por la suspensión, operaciones a ambos lados de la cadera y otras lesiones. En el 2009 admitió haber usado sustancias prohibidas entre el 2001 y el 2003, cuando jugaba con los Rangers.
El comisionado Bud Selig lo suspendió por 211 juegos en agosto del 2013, por violaciones ocurridas entre el 2010 y el 2012, descubiertas en la investigación de la clínica Biogenesis of America, con oficinas en Coral Gables, Florida, muy cerca de la casa de Rodríguez.
El árbitro Fredric Horowitz redujo la pena a la temporada del 2014, aunque dijo que había "evidencias claras y convincentes" de que Rodríguez había consumido tres sustancias prohibidas y de que en dos ocasiones había intentado obstruir las investigaciones. La suspensión le costó a Rodríguez 22,13 millones de dólares, de los 25 que debía ganar el año pasado.
Rodríguez demandó a la Liga Mayor de Béisbol, al sindicato de peloteros y al médico de los Yanquis, pero luego retiró las demandas.
Los Yanquis le adeudan 61 millones de dólares de un contrato a diez años por 275 millones.