Recuperar el título de campeón del torneo y el de la Serie del Caribe, son los dos puntos que encabezan la agenda de los Tigres del Licey para los próximos cuatro meses.
Ni los directivos, ni los fanáticos de un equipo que tiene la gloria en sus genes, se conforman con menos.
Así que para ellos es urgente rebotar del indeseado quinto lugar en el que quedaron en el 2014 con negativo registro de 19-31.
“Ganar es todo”, declara enfáticamente Miguel Ángel Fernández, el nuevo presidente de la franquicia más ganadora del circuito otoño invernal local con un total de 21 y también en la justa caribeña (10).
El departamento de Operaciones de Béisbol, que encabeza el gerente general Manny Acta y al que este año se unió Junior Noboa, ha realizado una labor encomiable en lo relativo a la contratación de los importados y en el pasado Sorteo de Novatos, principalmente.
El dirigente puertorriqueño Lino Rivera, de quien se resaltan su buen temperamento y buenas relaciones que suele sostener con los peloteros, tendrá disponible un envidiable material nativo con varios importados de buenas credenciales.
El grupo lo encabezan los conocidos lanzadores cubanos Yunesky Maya y Francisley Bueno, hombres grandes en la corona obtenida en la campaña de 1913-14, cuando derrotaron a los favoritos Leones del Escogido en cinco de los ocho partidos que protagonizaron en la final.
Tamnbién, Roman Quinn, un jardinero central que viene de jugar a nivel de AA con la organización de los Filis de Filadelfia; el antesalista Kyle Kubitza, quien ha estado entre AAA y Grandes Ligas con los Angelinos de Anaheim; el inicialista Jason Rogers, en igual circunstancia con los Cerveceros de Milwaukee, y el receptor Tyler Heinemam, sucursal AAA de los Astros de Houston.
De igual forma, Jorge Martínez, otro pitcher nativo de la Mayor de Las Antillas, que formó parte del representativo de esa nación que levantó se adjudicó el primer lugar en la pasada Serie del Caribe que tuvo lugar en San Juan, Puerto Rico.
